Organización y Conocimiento

Las nuevas estructuras organizativas emergentes se caracterizan por la Utilización intensiva de las TIC. Las tecnologías de la información afectan a las estructuras organizativas pues disminuyen el coste de coordinación y control; es decir no es necesario tener fuertes jerarquías verticales para que la información fluya a través de la organización de modo que los directivos y gerentes puedan tomar decisiones más adecuadas y en menor tiempo. La tecnología permite recopilar información del comportamiento de los procesos de negocio en tiempo real. Estas tecnologías son fácilmente replicables en otras empresas competidoras lo cual provoca un incesante lanzamiento de productos y servicios buscando una diferenciación permanente dentro de un entorno altamente competitivo. Las nuevas tecnológicas permiten automatizar procesos que se repiten y de gran volumen, esta característica afecta especialmente a la mano de obra involucrada en la producción de bienes. Sin embargo, las TIC traen consigo nuevos perfiles laborales especialistas en la aplicación de estas nuevas tecnologías. Las TIC permiten la externalización de servicios haciendo que los procesos sigan realizándose más allá de los límites físicos de las organizaciones. Además las TIC son las infraestructuras sobre las cuales poder desarrollar una gestión del conocimiento adecuada en las organizaciones. Una gestión efectiva del conocimiento mediante el uso de las TIC debe convertirse en una de las principales ventajas competitivas en la Sociedad de la Información.

Otra característica es el Énfasis en la explotación del conocimiento organizativo como fuente de ventaja competitiva. Es clave el fomento de estructuras colaborativas formadas por equipos multidisciplinares, con perfiles jerárquicos y funcionales diversos. Estos equipos productivos aportan conocimiento basado en distintas experiencias y puntos de vista favoreciendo la creatividad y la innovación en las organizaciones. La gestión del conocimiento debe ser una de las principales ventajas competitivas, viene de las personas que componen la organización. Cada vez es menor la diferenciación por TIC; las TIC no son una ventaja competitiva, son herramientas que la compañía debe tener igual que necesita disponer de liquidez para realizar sus operaciones. La clave está en cómo gestionar en red el conocimiento de las personas, y no esperar que las mejores ideas de valor provengan de áreas funcionales o personas concretas. El jefe no siempre tiene la verdad absoluta, la ventaja competitiva está en gestionar el conocimiento de los miembros de la empresa. Las estructuras horizontales facilitan esta gestión del conocimiento pues agiliza la transmisión de conocimiento entre los miembros que las componen.